Casi siempre que se habla de cirugía estética se hace desde el punto de vista de la apariencia, y en pocas ocasiones se asocia a la mejora en la salud de los pacientes; en efecto, es cierto que, ateniéndonos a criterios estéticos, la importancia de una nariz recta, simétrica, es notable, pues el conjunto del rostro se ve afectado y la armonía facial alterada si el tabique nasal se encuentra desviado.
Sin embargo, y más importante aún, son las consecuencias que produce en nuestra salud el desplazamiento del tabique nasal: esta desviación puede acarrear síntomas tales como sinusitis, dificultad para respirar y bloqueo de los senos nasales, congestión nasal, hemorragias frecuentes en la nariz, dolor facial y de cabeza, ronquidos y respiración ruidosa, etc. En efecto, una larga lista de problemas que se evitarían corrigiendo esta anomalía.
Se calcula que casi 3 de cada 4 personas tiene el tabique nasal desviado, y la mayoría de ellas no son conscientes de ello debido a que este desplazamiento es mínimo, con lo que en el momento en que se les presenta alguno de los síntomas anteriormente descritos, no lo atribuyen a la verdadera razón que los causa.
La solución a estos problemas es la rinoplastia, un tratamiento quirúrgico que corregirá la desviación del tabique y permitirá al paciente a disfrutar de una mejor calidad de vida.
En Clínica Ruber Castro Sierra somos especialistas en este tipo de tratamiento, avalándonos nuestros más de 30 años de experiencia. Realizamos un estudio pormenorizado de cada paciente, sentando las bases de lo que seguro será una exitosa y satisfactoria intervención, por lo que si estás pensando en someterte a una rinoplastia por motivos de salud o estéticos, te ofrecemos una primera consulta gratuita con la que asesorarte.