La queiloplastia, cirugía labial o de aumento de labios es una intervención de cirugía estética facial que realizamos en la Clínica Ruber para mejorar la belleza y armonía de los labios mediante el aumento o disminución de su volumen, o corrigiendo sus posibles defectos y alteraciones anatómicas ya sean congénitas o adquiridas.
Los labios tienen una gran importancia en la estética facial. Los labios turgentes se consideran uno de los principales rasgos de un rostro atractivo. Por eso las personas con labios muy finos o sin volumen pueden sentirse insatisfechos con su aspecto y desear unos labios con gran volumen. Por otro lado, los labios demasiado carnosos también suponen un problema estético. La queiloplastia se ocupa de corregir estas situaciones para darle al paciente unos labios más atractivos y acordes a su rostro.
Gracias a la cirugía labial es posible aumentar o disminuir la anchura y volumen de los labios superior e inferior, modificar su forma o revertir las imperfecciones que se producen por el paso del tiempo. En Estética Castro Sierra somos especialistas en queiloplastia. Si quieres mejorar el aspecto de tus labios, ponte en manos de nuestros especialistas.
El aumento de labios es el tipo de queiloplastia más demandada. Se trata de una intervención sencilla y mínimamente invasiva que se realiza de forma ambulatoria (dura una media hora) y solo con anestesia local. La operación consiste en la inyección de una sustancia de relleno en los labios, siendo la más habitual el ácido hialurónico o sus derivados, aunque hay varias opciones dependiendo de la duración que se pretenda conseguir.
Por ejemplo, para un efecto temporal se usan inyecciones de sustancias reabsorbibles (como el ya mencionado ácido hialurónico) mientras que si se desea un efecto duradero es necesario emplear sustancias no reabsorbibles. Nuestro equipo médico te ayudará a decidir qué producto es mejor para los resultados que estás buscando.
Según las necesidades de cada paciente, la inyección se puede realizar de 3 formas: en la zona interna de los labio (la que contacta con dientes y encías) para dar proyección y eversión; en el centro o porción carnosa para aumentar el tamaño y conseguir volumen; y/o en el borde mucocutáneo (unión de la piel con la mucosa labial) para definir y perfilar el labio o eliminar las arrugas peribucales.
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La queiloplastia u operación de labios es una intervención sencilla, se realiza con carácter ambulatorio y sólo requiere anestesia local. Por lo general no surgen complicaciones y la recuperación es bastante rápida. En la mayoría de las ocasiones la intervención se realiza con un objetivo estético, debido a la importancia de los labios en el conjunto del rostro, aportando personalidad y armonía.
Los labios pueden ser pequeños, delgados o sin perfilar. Pueden presentar pequeñas asimetrías o cicatrices, ya sean congénitas o causadas por lesiones o tratamientos previos. Mediante la infiltración de ciertas sustancias se puede conseguir unos labios con más volumen, mejorar la forma, dar simetría, proyección o perfilar los labios, manteniendo siempre un aspecto natural y estético. Existen tres tipos de queiloplastia, dependiendo de los resultados esperados. Son los siguientes:
La queiloplastia de aumento es el aumento de labios. Está pensada para personas con labios finos o que han perdido volumen con el paso de los años. Como ya dijimos, la forma más habitual de queiloplastia de aumento es la inyección de ácido hialurónico.
El ácido hialurónico es un polisacárido que está presente de forma natural en los tejidos conjuntivos humanos, incluyendo la piel. De hecho, es el principal componente elástico de la piel. Contiene agua (99,5%), y juega un papel importante en la formación de colágeno estable y en la organización de la matriz extracelular. Y por esa razón, es perfecto tanto para hidratar la piel como para rellenar los labios. El ácido hialurónico es también el tipo de relleno preferido por su aspecto natural y su capacidad de disolverse con el tiempo o con ayuda de la dermis. Los rellenos de ácido hialurónico retienen la humedad en la piel para aumentar el volumen, la forma y la estructura de los labios.
En la queiloplastia de reducción el objetivo es reducir el volumen labial. La operación elimina el exceso de tejido labial para reducir la apariencia de los labios demasiado grandes. El procedimiento dura entre 15 y 20 minutos y puede realizarse bajo anestesia local. Los candidatos para esta cirugía son personas con labios demasiado voluminosos que desean armonizar sus rasgos faciales.
La cirugía correctiva de labios está destinada a reparar los labios que han sufrido quemaduras, alteraciones congénitas (como el labio leporino) o lesiones de cualquier otro tipo.
El resultado de un aumento de labios en nuestra clínica son unos labios más gruesos, perfilados e hidratados; siempre respetando la naturalidad y expresión facial. Se consigue así un rostro más juvenil y atractivo. Los resultados pueden ser permanentes o temporales, dependiendo de la sustancia que se inyecte.
La intervención quirúrgica no tiene grandes complicaciones y la recuperación es muy rápida. El efecto secundario más habitual es la hinchazón de los labios y un leve entumecimiento. Sin embargo, esta hinchazón es temporal y puede controlarse fácilmente mediante la aplicación local de hielo.
La eliminación de los puntos se realiza siete días después de la intervención. Durante esos primeros días se recomienda seguir una dieta blanda, no realizar ejercicio físico, no aplicar calor en la zona y evitar la exposición prolongada al sol. El cirujano dará al paciente toda la información sobre las pautas a seguir.
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Esto depende del tipo de inyección que se realice para conseguir el aumento. En el caso de la inyección con ácido hialurónico los efectos disminuyen de forma gradual a medida que el cuerpo reabsorbe esta sustancia de forma natural. Se estima que los resultados del aumento se aprecian en todo su esplendor durante un periodo de 6 meses a 1 año. Después de eso siempre es posible aplicar una nueva inyección.
En resumen, la duración total de los rellenos labiales, depende de la cantidad de relleno inyectada, del metabolismo del paciente y de la sustancia utilizada.
Como ya hemos mencionado con anterioridad, el ácido hialurónico es parte de la estructura de la piel normal y sana. La función del ácido hialurónico es proporcionar nutrientes, hidratar la piel reteniendo agua y actuar como agente amortiguador. Sin embargo, su concentración disminuye con la edad. Las ventajas de este tipo de relleno para el aumento de labios son, entre otras:
Cualquier persona que quiera mejorar la apariencia de sus labios puede ser un buen candidato para la queiloplastia. Esto incluye a:
No obstante, hay pacientes en los que se desaconsejan este tipo de procedimientos. Por ejemplo, se recomienda no fumar, y si la persona sufre alguna enfermedad autoinmune o inflamatoria deberá mencionarlo. En cualquier caso, la clínica hará los exámenes oportunos para asegurarse de que el paciente es un candidato idóneo para la cirugía.
Es normal que los labios estén algo inflamados durante los días posteriores a la intervención. Lo normal es que se trate de una inflamación y desaparezca pasada una semana.
El aumento de labios con la mayoría de los inyectables es temporal, por lo que los efectos desaparecen por sí solos con el tiempo. Los inyectables permanentes son más difíciles de retirar, así que tenga esto en cuenta al tomar su decisión.
Todo depende del objetivo que se persiga. Mucha gente prefiere los rellenos temporales porque son reversibles y asequibles. Eso significa que si el paciente quiere mantener el volumen de sus labios solo tiene que hacer una nueva inyección, y si desea recuperar su forma original, también puede hacerlo fácilmente. Si el paciente no está contento con el resultado del aumento de labios por cualquier razón, el doctor puede inyectar una enzima disolvente llamada hialuronidasa para descomponer las partículas de ácido hialurónico y acelerar la velocidad de disolución del relleno.